Osa Argentina Organización Sionista Argentina
El presidente de la Organización Sionista Argentina (OSA), Sergio Pikholtz, dialogó con ItonGadol sobre el evento que se realizará el 8 de mayo. “La fiesta va a amalgamar la tradición con la modernidad, con amplia participación del público y el protagonismo de los jóvenes como ha venido sucediendo los últimos años”, afirmó.
-¿Cómo toma el desafío de poner en marcha el evento para esta fecha?
-Siempre resulta movilizador arrancar desde la Organización Sionista Argentina con las celebraciones de Iom Haatzmaut en nuestro país. Desde que tengo recuerdos, los actos festejando un nuevo aniversario de la independencia del estado de Israel fueron el evento comunitario más importante del año, y también el más esperado, especialmente por los movimientos juveniles en todas sus agrupaciones.
El desafío es muy grande porque las expectativas que despierta la fiesta son muy altas, por ello estamos convocados a ser creativos y transmitir lo que Israel significa y representa con el acto del 8 de mayo en el estadio Obras.
-¿Qué características prevé que va a tener esta fiesta?
-La fiesta va a amalgamar la tradición con la modernidad, con amplia participación del público y el protagonismo de los jóvenes como ha venido sucediendo los últimos años. Israel nos brinda tantas herramientas para poner sobre el escenario de Obras, un magnífico estadio, que lo que dura la fiesta nos obliga a seleccionar y elegir. Para ello contratamos un equipo profesional de primer nivel, muy experimentado en el armado de la fiesta de Iom Haatzmaut con excelentes ideas y más de una sorpresa ligadas al presente de Israel, que ya deja establecidas tres premisas principales sobre la Mediná: Democracia, Innovación y Diversidad.
-¿Hay algo en particular que distingue este año? ¿Cuál es el mensaje para la Kehilá argentina para este nuevo Iom Hatzmaut?
-Creo que estamos viviendo un momento de gloria judía y sionista como nunca antes, y todo porque Israel es la máxima expresión de lo que como civilización hemos podido construir. Considero que como nunca antes, Israel está fuerte, vigente e influyente en todo lo que tiene que ver con que el mundo sea un lugar mejor para vivir.
Desde las ciencias hasta los derechos humanos, desde el cuidado del medio ambiente hasta el arte, Israel es vanguardia al servicio de la humanidad toda, y tenemos no sólo el derecho sino la obligación de festejar este enorme milagro materializado en nuestros días. El sionismo hizo posible que dos mil años de diáspora terminaran en 1948 bajo la luz del profeta de nuestro tiempo Theodoro Herzl, que nos convocó a no dejar que sólo fuera una leyenda. Y es el sionismo el que motoriza una vez más la fantástica vivencia de celebrarlo en comunidad.
Fuente: Iton Gadol
